España concluye el campeonato con un balance de siete medallas en total.

Robert Vilarasau logró la tercera plaza en DMT junior

Noemí Romero se hizo con el bronce en la prueba junior de Trampolín.

Melania Rodríguez se alzó con la medalla de oro en la competición junior de Doble Minitramp al superar en la final a la rusa Aleksandra Bonartseva y a la británica Bethany Williamson. El alto nivel de esta competición ha hecho que todo se resuelva en cuestión de pequeños detalles y la española ayer tuvo el viento favor pese a que entró con la cuarta mejor marca a la ronda decisiva. Séptima acabó la madrileña que entrena en Albacete, Noemí Rodríguez.

Precisamente a Noemí le sucedió algo parecido en la final de trampolín junior. En un ejercicio con mucha seguridad y con 51.955 se metió tercera y merecida medalla de bronce tras la rusa Meri Golota y la alemana Roesler. La otra rusa, Lebedeva, falló en su ejercicio y la española se lleva a su casa un preciado metal de bronce.

El tercer metal conseguido por España fue por medio de Robert Vilarasau en el Doble Minitramp junior en una prueba en la que el vallisoletano David Franco fue octavo. Una gran experiencia, aun así, para el benjamín de la selección española.

Y es que Valladolid trajo suerte a la delegación española en esta XXV edición del Campeonato de Europa de Gimnasia en Trampolín ya que en total fueron siete las medallas obtenidas. El oro de Melania y además dos platas y cuatro bronces. Tres medallas individuales y cuatro por equipos. Un gran bagaje

Más finalistas

Claudia Prat y Cristina Sainz ocuparon la sexta plaza en la clasificación final de Trampolín Sincronizado, mientras que las junior Noemí Romero y Melania

Rodríguez, que se tenían que multiplicar en las finales, acabaron en la séptima plaza en una final dominada por Bielorrusia y Rusia.

Antonio Santos, por su parte, concluyó en la quinta plaza del Doble Minitramp masculino y su compañero Alejandro Bernárdez, fue sexto

Claudia Prat compitió en la final de DMT senior hasta que le dieron las fuerzas y acabó octava en una prueba que no es su especialidad.

Dieciséis competiciones individuales se disputaron ayer, las últimas, aquellas que han acercado al Polideportivo Pisuerga de Valladolid al ‘circo del sol’ y al sueño de volar. En la disciplina olímpica de trampolín, la última en celebrarse en categoría masculino y volando literalmente el campeón bieloruso Uladzislau Hancharou y en féminas, la mejor, la rusa Yana Pavlova.

MELANIA RODRÍGUEZ: “Me sentí muy bien cuando clavé el segundo pase”.

La gallega residente en Madrid se coló en la final de Doble Minitramp junior en la cuarta plaza, pero su segundo salto en la ronda decisiva le catapultó a lo más alto. “Me he sentido muy bien cuando clavé el segundo pase (34.100)”, señaló. Para la tercera del mundo y vencedora en algunos internacionales a priori “no iba a por el oro pero sí a por medalla”, aunque es consciente con esta igualdad de que “un paso, una tontería te puede dar sacar del podio”, como a ella misma la sucedió poco después en la competición de sincronizada con Noemí Romero. Los objetivos de esta gimnasta de quince años son ahora “seguir entrenando, sacar cosas nueva y mejorar, además de pensar en los retos de próximos el Europeo y  el Mundial 2017.

¡¡Enhorabuena a todos!!